Porque somos jóvenes nos unimos. Nos buscamos en ese encuentro que no se planifica con tiempo extra; solo el justo para la presentación y el abrazo sincero, porque al final somos una misma familia extendida por toda una Isla.
Llegamos de muchos lugares con el mismo sentimiento surcándonos el pecho: Cuba. La Nuestra, la mayor de las pasiones que caben en el pecho que se desnuda limpio y abraza como sacerdocio las ideas y las metas de quien es verbo-hijo-luz en estas tierras rebeldes: Che Guevara.
Nadie convocó a tribunas ni pronunció discursos, y sin hablar todos tomamos la misma decisión: enlacémonos los unos a los otros, por Cuba, por nosotros, por todos.